lunes, 30 de abril de 2018

Una visita a Cala Salada

Decía MJ esta mañana: "Que disfruten de la isla. Seguro que ahora es un buen momento". A lo que respondía El Tapir, un experto en esa isla: "No lo creas. Eso era hace 15 días nada más. Hoy los atascos ya están a la orden del día, y eso que todavía no ha entrado el grueso de los vehículos de alquiler. ¡Dios nos coja confesados!"

Pues sí, esto se va llenando peligrosamente y, en previsión de que la cosa vaya a mayores, que irá, G.U. ha decidido darse un garbeo por Cala Salada, un hermoso lugar al que hacía muchos años que no acudía, dado que está en una especie de cul de sac, y para acceder a ella hoy en día, en plena temporada, hay que dejar el coche a unos cuantos kilómetros y ¡coger un autobús lanzadera!, total para estar como sardinas en lata en una playita pequeña, llena de piedras y con el agua plagada de yates.


[Cala Salada (30/4/2018) / Fotografías: granuribe50]

Pero hoy estaba la mar de bien, con esas casetas de pescadores y sus puertas, las gaviotas, la playa vacía y sin yates... De manera que, telefonillo en mano, hemos aprovechado para tomar algunas instantáneas del lugar, ya que más adelante será de todo punto imposible. Después nos hemos dirigido a Santa Inés, pero de eso ya hablaremos.

domingo, 29 de abril de 2018

Unos días en Ibiza


La verdad es que el director de TV3 Vicenç Sanchís, en palabras de Ferran Monegal, «ha transformado en un tiempo récord las instalaciones de Sant Joan Despí en el gran templo de las misas procesistas. Ha conseguido que ya no haya televidentes, sino fieles devotos que comulgan. El fervoroso seguimiento que ha dedicado a los exiliados, o al proceso en general, ha sido colosalmente efectivo».


Que lo sepan ustedes, G.U. marcha diez días a la "isla mágica" (Ibiza), donde diversos asuntos reclaman su atención. Eso sí: cachondeo y gin-tonics asegurados y poca TV3 en casa de la suegra.

Cercas fija el inicio del procés en junio 2011

«Lo que ha ocurrido en Cataluña ha tenido el apoyo de los poderes más importantes. Decir que ha salido del corazón de la gente, no es cierto. La fecha del inicio del procés no es la sentencia del Estatut, eso es una falsedad histórica. Lo demuestra el hecho de que las manifestaciones posteriores no fueron muy distintas a lo habitual. CiU pacta en esos años con el PP. El cambio se produce con el asalto al Parlament, en junio de 2011. Ocurre algo que Jordi Pujol, de hecho, deseaba y es que la gente protestara ante el Palau de la Generalitat o el Parlament, porque eso podía demostrar dónde estaba el poder. Pero cuando lo hicieron fue con un enorme malestar y enfado, como en toda Europa.

El Gobierno catalán, es decir, la derecha catalana, proyectó una operación evidente, apoyado por los poderes económicos, por la élite económica de este país, que se apuntan a eso, con su hombre al frente, que es Artur Mas. Eso lanza el procés, para no rendir cuentas por la crisis económica. El culpable es Madrid, el enemigo exterior, un clásico en estos casos. Y todo para ocultar, también, la oceánica corrupción, y repito: oceánica, oceánica corrupción, con la imagen del patriarca maltrecha, con Jordi Pujol. El procés no se entiende sin el apoyo de la derecha catalana y la élite económica. Y lo que pasa es que no tuvieron en cuenta que es fácil, con sentimientos y emociones, sacar a la gente a la calle, pero es muy difícil decirles que vuelvan a casa. Meter al genio en la botella es ahora muy complicado, aunque lo intenten».

Javier Cercas

Verbigracia: A ver cómo le decimos a este sujeto que peregrinaba el día 27 a Montserrat de esta guisa que se vuelva  a su casa

sábado, 28 de abril de 2018

Sobre "Ordesa" (y 2)

La pérdida de tus padres puede suponer un trauma, la sensación de que uno pasa a "primera línea de fuego". Tanto que a veces se convierte en todo un estado de ánimo que perdura en el tiempo. Eso le pasó a Manuel Vilas (Barbastro, 1962) cuando sus progenitores murieron. Paradójicamente, de ese caos vital ha surgido un buen libro, «Ordesa» (Alfaguara), un viaje emocional a su pasado para tratar de reconstruir el presente.

Manuel Vilas; Ordesa; 1980; Alfaguara, 2018 (págs. 376-378)

Rechaza Vilas que lo que ha escrito pertenezca al género de lo que se ha dado en llamar "autoficción". Según él "es un libro autobiográfico, lo que pasa es que tiene la arquitectura de una novela. Está en la línea de un libro de memoria sobre mi pasado. He conseguido hablar con mi pasado y, al hablar con mi pasado, de alguna manera me he perdonado. Decir los errores es sano. Normalmente, un ciudadano si comete errores va al psiquiatra; los escritores escribimos un libro, que en este caso tiene un epílogo con poemas, que vienen a ser como un resumen de todo lo anterior".

Manuel Vilas, Ordesa; 974310439 —fragmento— ; Alfaguara, 2018  (págs. 383-387)
En fin, Gran Uribe vivió con profundo desánimo la pérdida de su padre y también la de su madre, personajes a los que recuerda casi todos los días y por eso, a su modo, hubiera querido rendirles un homenaje, un poco como lo que ha hecho Vilas en "Ordesa". Pero no sabe hacerlo y, además, piensa que no podría importar un pepino a casi nadie.

Por eso agradece la valentía del autor, un adusto aragonés de pasado que se intuye convulso, de palabra escueta, sin adornos y con una escritura poco convencional, que en los poemas finales que cierran el libro nos evoca un poco a algunas de las letras de las canciones de José Antonio Labordeta o, incluso, a los poemas de su hermano Miguel.

viernes, 27 de abril de 2018

Iniesta se va a China



Monumento a Iniesta en Fuentealbilla (Albacete)
[granuribe50]
Tiene mucha razón Ramos, rival y sin embargo amigo. G.U. también le tiene gran aprecio a Andrés Iniesta. La "prueba del nueve" es que siempre que va por Albacete (y espera volver pronto) aprovecha para hacer una parada en Fuentealbilla, su pueblo natal, para rendir pleitesía (frente a ese dorado monumento, un punto cutre) a un gran jugador y gran tipo, además de humilde. En Bilbao se la tienen jurada, pero eso debe de ser por haber metido el gol que hizo a España campeona del mundo y no por otras historias.

Decía ayer Iniesta que no se veía a sí mismo iniciando otra exigente campaña en el Barça y que por eso se irá a acabar su carrera deportiva en el fútbol chino. Lejos de Europa, dice, para evitar que un día deba enfrentarse al club de su vida. En fin, Andrés, si es solo por eso, te podrías haber ido a jugar al Albacete Balompié, equipo que está pasando por muchas dificultades, donde serías muy bien recibido. Allí tampoco correrías el peligro de enfrentarte al Barça, ya que está en 2ª división y sin posibilidad de ascender a 1ª, aunque quizá no podrían pagarte lo mismo que los chinos.


En fin, como dice el tio de Iniesta: “Mientras no se vaya con el del lacito...” (Pep Guardiola—Pepe Hucha—, of course).



¿A qué grupo de catalanes pertenece usted?

Leemos en la prensa digital una especie de recensión de los cuatro grupos en que parece ser que algunos de los independentistas han dividido (en twitter) a la población que vive en Cataluña. De tan cutre que es, parece falso. Empiezan definiendo a los españoles como gente primitiva y falta de destreza que arrasa por allí por donde pasa. Y en cuanto a los llamados botiflers (los del cuarto grupo, como veremos), tendrán que ser juzgados, según ellos, por los Tribunales de la República por Alta Traición, con penas alternativas a la prisión, como serían las de inhabilitación y privación del derecho a voto.

En un ejercicio de concreción, y un poco a semejanza de las Leyes de Nüremberg, "el supremacismo independentista ha segregado en cuatro categorías a los catalanes. Aina Vidal, miembro de los autodenominados Comités de Defensa de la República (CDR), se ha ocupado de ello y lo ha publicado en un hilo en su cuenta Twitter sobre “el tema de la nacionalidad catalana y el censo electoral de la república”. En él que establece unos “criterios de nacionalidad” basados en el “perfil de los residentes en Cataluña”. No todos los residentes en Cataluña tendrán derecho a voto en la futura república catalana. El ‘apartheid’ nacionalista desarrollado por Vidal divide en cuatro los grupos que configuran la población catalana".




1.— En primer lugar están los catalanes de pura cepa. Está integrado por aquellos que llevan varias generaciones viviendo en Cataluña. Ellos son el eje (pal de paller), continuadores de la historia milenaria de Cataluña desde los Condados de Barcelona.

2.— En el segundo grupo social tenemos a los catalanes recién llegados, o xarnegos con ‘x'”. Se trata de gente que huyó de la miseria de su país para encontrar un país que los acogió con los brazos abiertos, y que está profundamente agradecida por ello. Son los que han aportado la sangre nueva que debe renovar la Patria Catalana.

3.— El tercer grupo estaría formado por los colonos, o charnegos con ‘ch'”. Son gente profundamente desagradecida que odian la sociedad que les ha acogido. Muchos llevan 40 años viviendo aquí y ni siquiera entienden el catalán. Normalmente ocupan los estratos más bajos de la sociedad, viviendo de las subvenciones.

4.— El último grupo, peor aún que el de los colonos, es el de los botiflers. Son la gente que ha traicionado a su patria por cuatro lentejas del estado español, o por un odio y un resentimiento congénito hacia los suyos. Es el grupo más peligroso. 

Extraído del twitter de @AinaVidal33 (ya eliminado)




jueves, 26 de abril de 2018

Sabina, Serrat, Millás y el gin-tonic de media tarde

No vamos a hablar de la sentencia de "la manada". No somos jueces ni tenemos a mano las pruebas, los vídeos y todo eso, aunque a G.U. no le gusta que sistemáticamente se empiecen a poner en crisis, por parte de legos en la materia, las sentencias de los jueces, que en muchos casos se limitan a aplicar el código penal vigente. Quizá haya que tomarse en serio la modificación de ese código, adaptándolo a los tiempos que corren, aunque uno no sabe quiénes han de ser los encargados de cambiarlo. ¿Los del gobierno? ¿los diputados? ¿los jueces? ¿Pablo Iglesias? ¿"el pueblo"?



Pasemos a otro asunto un poco más baladí, pero no mucho. Leemos en la prensa una buena noticia, dado que estábamos un poco inquietos con la salud de Sabina, un habitual de este blog, y con la suspensión de los conciertos de su gira, que ya se verá en qué queda. Algo que afortunadamente no le sucede a Serrat (otro habitual), que presentó el otro día su gira "Mediterráno de capo" en Roquetas de Mar, con un sexteto de músicos de lujo (Miralles, Kitflus, etc.).

El caso es que la clínica Ruber de Madrid ha entregado un parte médico que asegura que el cantautor Joaquín Sabina (69) evoluciona “bien” y “sin complicaciones”, tras la tromboflebitis que lo aquejó en días pasados. “Permanecerá durante varios días hospitalizado y bajo tratamiento farmacológico”, se lee en el comunicado. Según la productora, las próximas dos fechas en La Laguna, Tenerife y en La Palma también serán suspendidas y, junto a la fecha de La Coruña, todas se reprogramarán cuando el artista logre su recuperación.

Y celebramos su recuperación tomando, a su salud y la de Millás, un gin-tonic de media tarde. El más sencillito: con ginebra Gordon´s, tónica Schweppes y una rodajita de limón. Tome nota, Tapir, que falta nada para ello en Ibiza.

Sabina y Millás departen saboreando el gin-tonic de media tarde
Leamos algo que escribió el propio Juan José Millás en 2009, en una columna referente a Bárcenas titulada Que le den. Es antigua, sí, pero en cierto modo sigue vigente, ya que uno de los protagonistas —Rajoy— sigue igual de gris y rencoroso, fumando puros y dejando que las cosas se le 'arreglen' solas, sin él "bajar del autobús", como con Cifuentes:

«Con el primer sorbo al gin-tonic de media tarde, caigo en el delirio de que soy senador y tesorero del PP. Me llamo Bárcenas y pesan sobre mí gravísimas sospechas que los medios de comunicación airean sin pausa. Media España piensa que soy un chorizo. Me ven por la tele y dicen ahí va un mangante, un sinvergüenza que se sirve de la política para robar. ¿Qué hacer?, me pregunto tras paladear el segundo sorbo del gin-tonic. Lo tengo claro: dimito a cien por hora, me desaforo en dos minutos, convoco una rueda de prensa y abro públicamente en canal mi patrimonio. Todo eso, claro, en el caso de ser inocente. Tras apurar otro sorbo de mi elixir vespertino, que acompaño de una patata frita, imagino sin embargo que soy culpable. ¿Qué hacer entonces? Dilatar el proceso fingiendo interés en acelerarlo, aferrarme a los cargos, sobreaforarme, en fin, y amenazar a mi partido con sacar trapos sucios relacionados con su financiación.

Doy un cuarto sorbo a mi gin-tonic e imagino ahora que soy Rajoy, ese hombre que ha hecho de la normalidad una bandera. Miradme, soy normal, grita en sus mítines, soy gris, rencoroso, insatisfecho, amargado. ¿Le parecerían normales a un hombre normal los enjuagues económicos de Bárcenas? ¿Es verosímil, desde la normalidad, guardar 330.000 euros debajo de la cama? ¿Es habitual devolver los créditos en billetes de 500 euros? Lógicamente, no. Entonces, tras dar un quinto sorbo a mi gin-tonic, voy y lo ceso y le exijo que entregue el acta de senador. Pero mientras me llega el segundo gin-tonic imagino que el tesorero de las narices conoce secretos inconfesables sobre mí. ¿Qué hacer en tal caso? Defenderle, claro. Hay un problema: el del ciudadano que se hace las mismas conjeturas que yo incluso sin necesidad de apurar un gin-tonic. A ése, me digo ya completamente en el papel de Rajoy, que le den».

miércoles, 25 de abril de 2018

Sobre el caso Cifuentes

Premio Cervantes: el abrazo del oso
Puede ser casualidad, pero Mariano Rajoy no va dejando títere con cabeza, sin "bajar del autobús" (H.H. dixit). Es un maestro en eso. Gran Uribe cree que ya no queda nadie en su partido que le pueda hacer sombra. Cospedal está encantada como ministra de Defensa (y Tot Barcelona, un fan de ella, también) y no parece constituir una amenaza. Quizá, pues, sea el momento del resurgir de Floriano... ¿Recuerdan a aquel impagable sujeto de las corbatas? ¿Qué fue de él?

Ahora Rajoy dice que Cifuentes "ha hecho lo que tenía que hacer", cuando hace unos días decía defender lo contrario y todo el partido la ovacionaba. Y en la entrega del premio Cervantes le propinó el abrazo del oso. Ha antepuesto el Gobierno de Madrid a la ambiciosa carrera de su presidenta. Una menos. Cifuentes no valía una misa ni un ejercicio extremo de solidaridad, menos aún cuando ella misma había colocado tan alto el umbral de la ejemplaridad: "Corrupción cero. Levantar alfombras. Regenerar la vida política caiga quien caiga", proclamó en un discurso premonitorio. Y ya cuando el otro día denunció las mangancias de la nonata "Ciudad de la Justicia" se desataron todas las alarmas. ¿A ver si esta tía nos va a dejar en pelota picada a todos? Se ha hecho la chula y los albañales de la política más sórdida la han devorado. ¿A qué se dedicará ahora esa espabiladilla que, probablemente, no sepa hacer otra cosa que medrar?

G.U. debe confesar ante ustedes que en su día (hace 45 años) robó algún disco en el C.I. Pecadillos de juventud, aunque tuvo la suerte de no ser descubierto. Después no ha vuelto a robar nunca nada a nadie, ni siquiera al fisco, que quede claro. Pero no fue descubierto y, por tanto, no se grabaron imágenes y ahora no se dedica a la política. ¡Dios le guarde! Pero nunca se dedicaría a ella si tuviera ese tipo de puntos oscuros en su pasado o en su presente.

El caso es que, al final, la gente en política cae por los motivos más "nimios", entre comillas (lo del máster no lo es, ojo, ni esto tampoco), en comparación con otros asuntos de mayor enjundia, aunque si te dedicas a esto ya puedes intuir que te pueden clavar un cuchillo por la espalda en cualquier momento. Les pasa lo mismo que a los mafiosos; tienen concomitancias unos y otros, sin duda.

Esas grabaciones se suelen destruir a las pocas semanas, pero ésta pervivió siete años... ¿Por qué? ¡Ah! ¿Mafia pura que pulula por las alcantarillas del PP? En cualquier caso, es un tema interesante para una novela de serie negra. Y en cuanto a PSOE y Pablo Iglesias, están muy enfadados, quizá porque les han chafado la guitarra de la moción de censura y de llegar al poder por atajos... El PP ha vuelto a dar una imagen lamentable pero volverá a ser votado.




En fín, las redes están llenas de eso que llaman "memes" alusivos al asunto (hay infinidad de ellos, quizá hayan recibido algunos por WhatsApp), bastantes de ellos de muy mal gusto. Nuestros internautas más chistosos (y más ociosos) se han puesto a trabajar duro nuevamente. Por eso, Gran Uribe quiere hacer su modesta y discreta aportación al tema, añadiéndole un poco de glamur. Por cierto, la firma Olay debe de estar entusiasmada con esta publicidad gratuita.

[granuribe50]

martes, 24 de abril de 2018

Habla el inventor de "Espanya ens roba"

Veamos lo que dice Alfons López Tena, el independentista inventor del "Espanya ens roba" (¡en mala hora, malandrin!) y también del vocablo "procesismo" (tantas veces utilizado en este blog, aunque uno creía que fue Lluís Bassets el que lo utilizó por primera vez). Esa palabra intenta describir al procés como un medio de vida para muchos, como perpetuum mobile, como elemento que hace girar la rueda del hamster al infinito. En fin ya saben. El caso es que a López Tena hace un tiempo que no le gusta en qué ha devenido esto y no tiene ningún problema en decírselo a quien quiera escucharlo (no es el caso de TV3, obviamente, donde probablemente está vetado).

Aquí no lo pueden ni ver y me lo están moliendo a palos en las redes por la última entrevista que ha concedido. Ya saben que eso de la disidencia no está muy bien visto por estos pagos y suele recibir severos correctivos. De ella, suprimimos el formato pregunta-respuesta y nos circunscribimos a algunas de las cosas que ha dicho. Obviamos el tema de la justicia alemana, más coyuntural, al que se dedica un buen espacio; si eso despierta su interés, les remitimos al final al enlace a la entrevista completa en su formato original.

La cosa empieza con esta especie de entradilla, para centrar el tema:

Alfons López Tena
Alfons López Tena (1957) es el independentista heterodoxo oficial de la comunidad catalana. Para empezar, es valenciano. Además de exvocal del Consejo General del Poder Judicial, bestia negra de los medios de comunicación nacionalistas —que no le invitan a sus tertulias ni por equivocación— y mosca cojonera del procés separatista. Especialmente esto último. En una región volcada en el masoquismo, las entrevistas de López Tena son leídas con la misma mezcla de dolor y placer que se siente cuando uno presiona con la punta de la lengua una muela cariada. Porque López Tena, buen conocedor de lo que se cuece entre bastidores del procés, no suele reprimirse a la hora de decir aquello que todo separatista de bien se niega a creer: que Cataluña jamás será independiente; que los catalanes no quieren en realidad la independencia, sino desear la independencia; y que los líderes del procés jamás han tenido otra intención que la de implantar una dictadura comunitarista maquillada por el voto popular de la mitad de los catalanes.


Estábamos preocupados por la desidia del Estado en este asunto (Rajoy fumando puros como un descosido), pero López Tena nos tranquiliza: lo están haciendo muy bien, como rezaba aquella sicalíptica canción de un grupo de la movida viguesa llamado Semen Up. Y puede que tenga razón, él sabe mucho más que nosotros, ya que ha estado ahí dentro.

Bueno, dejémonos de preámbulos y pasemos a leer algunas de las cosas que ha dicho el susodicho López Tena, y que en general tienen bastante fundamento:

—En el fondo, el Estado lo ha hecho bien. Porque ellos sabían desde el primer día que esto era un farol por parte de Mas, Puigdemont y Junqueras. Que sólo se trataba de subir el nivel de ruido para sentar al Gobierno español en una mesa y conseguir contenidos del Estatuto que fracasó en 2010. Y entre otras cosas lo sabían porque los mismos Mas, Puigdemont y Junqueras se encargaron de ir diciéndolo por Madrid. “Es que no nos hacen ninguna oferta, es que nos tenéis que hacer una oferta, es que tenéis que darnos algo”.

—De la misma forma que lo peor que le puede pasar a un hipocondríaco es caer enfermo, porque eso le reafirma en su hipocondría, lo peor que le puede pasar a esa mitad de los catalanes que obtienen placer del victimismo, de la sentimentalización, de la falta de proyecto político y de la negativa a rendir cuentas de nada, es que efectivamente se les trate como a víctimas. Porque entonces se hunden en eso.

Sólo hay que mirar la situación actual. Media Cataluña se ha dedicado al folclore sentimental: a los lazos amarillos, a los conciertos, a las manifestaciones y a tocar la guitarra. Es decir, a algo que no es ya un proyecto político, sino un constante darse satisfacción por lo buenos que son y lo mucho que les persiguen. Alguno hay que ha hecho incluso un paralelismo entre Artur Mas y Nelson Mandela. En este sentido, la táctica del Gobierno ha sido muy efectiva. Porque ha metido a los catalanes en un carril sin salida: el de la queja victimista. Y esto va para largo, porque los presos van a estar en la cárcel durante muchos años. Y con eso el Gobierno ha dejado de tener un problema político y ha pasado a tener un problema, en todo caso, de orden público.

—Durante el último siglo ha habido ciento cincuenta independencias y entre ellas ha habido de todo. Pero no ha habido ninguna que se haya conseguido porque el Estado original haya tenido un ataque de buen corazón, sino porque mantener la situación de dominio generaba más inconvenientes que permitir la independencia. Así que en Cataluña se debería haber llegado a una situación en la que para España fuera más rentable la independencia que no la continuidad.

La independencia debería ser un proyecto político, no esta cosa paternalista que han hecho los procesistas. Esa condescendencia, ese paternalismo, esa mentira continua que los procesistas han utilizado puede funcionar para los suyos. Porque es un comunitarismo autoritario. Pero en los contrarios levanta todas las alarmas. No se puede hacer una independencia que implique una guerra civil.

—Mi tesis es que los catalanes desean la independencia, pero no la quieren. Como decía Atatürk, no existen los pueblos oprimidos. Si están oprimidos es porque se dejan. Y yo añadiría que si están oprimidos es porque quieren, porque lo desean. En Cataluña se sigue votando a los mismos hagan lo que hagan, digan lo que digan, prometan lo que prometan. ¿Por qué? Porque lo que quieren es eso: alguien que les proteja de los abusos y prepotencias del Estado central, pero que no les lleve a la independencia. Porque no la quieren, en realidad. Lo que desean es desearla indefinidamente.

—Ante la situación de dominio de España, habiendo perdido las instituciones, el derecho, etcétera, los catalanes respondieron replegándose. Y se replegaron generando una ideología comunitarista y autoritaria. Es decir: “Todos juntos y todos agrupados, porque así sobreviviremos”. Pero eso, ¿qué comporta? Comporta que no haya ninguna crítica, ningún pensamiento, ninguna individualidad.

Y por eso Cataluña, en materia de pensamiento, no ha producido nada durante los últimos siglos. Y lo que ha producido en aquellos terrenos en los que se requiere individualismo es muy escaso o fruto de catalanes que han salido huyendo de Cataluña. Así que gracias a esa ideología comunitarista y autoritaria se ha formado una resistencia que ha permitido que siga existiendo un pueblo catalán, pero, al mismo tiempo, ha provocado que los catalanes sean incapaces de culminar ningún proyecto político. Porque el catalán está programado para resistir, pero no para avanzar.

—Los españoles se quejan mucho de esto: "El Estado ha desaparecido en Cataluña". Basta con mirar el orden del día de una sesión del Congreso o del Senado y mirar una del Parlamento de Cataluña. O comparar la lista de los acuerdos del Consejo de Ministros de una semana cualquiera con la lista de los acuerdos de la Generalidad. Y se verá que en un caso se trata de asuntos sustanciales y en el otro, bueno, se trata poco más que de jugar a las guarderías. Yo estuve en el Parlamento de Cataluña y  puedo asegurar que aquello es la nada.

—En los medios controlados por Convergència y ERC hay instrucciones. Y listas. Por eso hay gente que jamás aparecerá en esos medios. Y eso incluye a medios públicos y concertados, como La Vanguardia, El Periódico de Cataluña o RAC1. Es decir todos los que dependen del presupuesto público y forman parte de las redes clientelares del régimen procesista. Es el comunitarismo del que hablaba antes. “Todos juntos, todos unidos y todos callados, porque fuera del rebaño hace mucho frío y los lobos nos van a comer”.

Por eso, cuando ha aparecido alguna voz discrepante interna se ha presionado para que su situación se volviera insostenible. A base de insultos, de descalificaciones y de trampas. Y eso me afecta a mí, a Albert Boadella, a Ignasi Guardans o al mismo Salvador Sostres. Eso, al mismo tiempo, les reafirma a ellos: “¿Veis como eran traidores?”.

—¿Recuerda cuando jugaron a la república de la señorita Pepis, esa república que no tenían ninguna intención de implementar? ¿Recuerda la ley fundacional de la república? ¿La delegación en blanco de la facultad legislativa del Parlamento al govern para que este pudiera legislar por decreto en todas las materias que fueran desarrollo de esa ley? Que, como era una ley fundacional, lo incluía todo. Y algo más. No sólo nombran ellos los jueces, sino que esos jueces no pueden juzgar ninguno de los decretos que haga el presidente en desarrollo de la ley fundacional.

A eso no se han atrevido ni Putin ni Erdogan. A eso sólo se atrevió Hitler con la Ley Habilitante. Así que, ¿cuál es el proyecto político que tiene esta gentuza en la cabeza? ¿Qué es lo que harían si pudieran? Y eso lo ha hecho Carles Viver Pi-Sunyer, lo ha hecho Jordi Turull, lo ha hecho Carles Puigdemont, lo ha hecho Marta Rovira y lo han hecho los de la CUP. ¿Cómo se llama un régimen así? Dictadura, obviamente.

Una dictadura con voto popular. ¿Quién utiliza en Europa el eslogan de “la voluntad de un pueblo”? Marine Le Pen. ¿Quién dice “la voluntad del pueblo está por encima de las leyes”? Erdogan, Putin, Trump y el partido polaco Ley y Justicia. ¿Quién dice “los jueces no pueden perseguir a los gobernantes”? También Erdogan, Putin, Trump, y el partido polaco Ley y Justicia.

—Inés Arrimadas les ha ganado las elecciones y la han demonizado. Para ellos, Ciudadanos no existe y les da igual que obtenga tres diputados o treinta y seis. Pero esto siempre lo han hecho igual. ¿Qué ocurre en los telediarios? Primero sale uno del Gobierno español diciendo no sé qué. Y eso se presenta como una gravísima agresión a Cataluña. Después sale Carles Puigdemont (o Artur Mas en su momento). Y después sale uno del PP o de Ciudadanos. Es decir, el contraste. Si a ti te ponen un monstruo, luego tú, y luego otro monstruo, quedas muy bien. En Cataluña, los contrarios son monstruos y los discrepantes internos no existen.
Es la táctica del ISIS. “Voy a hacer algo horroroso para que los contrarios caigan en la trampa de culpar a todos los musulmanes porque eso me permitirá decir que nos atacan por ser musulmanes”. Y el corolario de eso es: “Venid con nosotros porque nosotros os defenderemos”. Y eso tiene una segunda consecuencia. Si se supone que te atacan por ser catalán, todo aquel catalán que no esté con ellos es un traidor o no existe.

—A Puigdemont puedes rellenarlo con lo que quieras. En una entrevista que le hizo la extrema izquierda alemana de Die Linke, el entrevistador le dice “usted debería ser marxista”. Y Puigdemont responde: “Ah, puede ser, yo nunca he sido ni de derechas ni de izquierdas”.

Puigdemont es muy limitado. Yo siempre he pensado que a lo máximo que podía llegar en la vida Artur Mas es a jefe de planta de El Corte Inglés. Pero claro, es que Puigdemont no habría podido pasar de una parada en un mercadillo callejero. No da para más. Y como no da para más, es ciclotímico. Igual tiene una idea que la contraria. Depende del último con el que haya hablado. Además, como en todas las cortes, en la de Puigdemont hay celos y hay envidias.

—Hay un jugador, que es ERC, que está descabezado. ERC es un partido piramidal, y cuando te cargas la cúpula, el partido no funciona. Convergència, tres cuartos de lo mismo. El clientelismo y la corrupción es la misma, pero ahora ya se mueve a un nivel muy, muy bajo. Y la CUP, lo mismo. Así que hay cuatro jugadores. Dos de ellos son un poco sólidos (ERC y Convergència) y los otros dos son el caos (Puigdemont y la CUP). ¿Cómo quieres predecir lo que van a hacer y lo que no? Es imposible. Ese es un consejo básico que ellos no han seguido: no consumas tus propias mentiras. Dicho de otra manera. No te metas la droga con la que traficas. Lo más probable es que haya nuevas elecciones. Pero por caos, no porque tengan un plan.



Adiós a Eugeni Forcano

Pues sí, un habitual de estas páginas que se nos va. Un fotógrafo como la copa de un pino al que descubrió Josep Pla.


[Clic para ampliar]

Enlace al blog del gran Uribe: Forcano y la Barcelona de los 60

lunes, 23 de abril de 2018

"Ordesa" en el "Día del Libro"

«Hay libros que lees boqueando, como si acabaran de sacarte de la atmósfera, que te arrastran a las profundidades del océano. Libros como Ordesa, de Manuel Vilas, al que Dios confunda por rompernos el alma».
Juan José Millás

Pues sí, viene a ser esto. Gran Uribe está acabando de dar sus postreras boqueadas sumergido en este último ejemplar, por ahora, del género al que han puesto la etiqueta de "autoficción". Le agrada a este bloguero ese género, quizá porque le gustaría practicarlo, pero desgraciadamente le falta el talento necesario para ello. Y es que... hay que proclamarlo claramente: "el que vale, vale, y el que no, pa cabo", como decían en la mili.

Portada y texto de la contraportada de Ordesa, de Manuel Vilas (Alfaguara, 2018)
Conocíamos a Manuel Vilas por la carta abierta que dirigió hace un mes y medio a Ada Colau, que publicamos aquí en la entrada Carta abierta de Manuel Vilas a Ada Colau. Era muy dura, y ahora nos encontramos un libro también extremadamente duro y sombrío en ocasiones (bastantes), pero que tiene momentos llenos de luz (pocos) como el que reproducimos aquí, con Juan Sebastián (así llamaba Manuel Vilas a su padre, en honor a Bach) comiendo tortilla de patata en los soleados veranos del Cambrils de los primeros setenta, a tiro de piedra de Barbastro, su ciudad de origen.

No era cosa de amargarles Sant Jordi a ustedes (para G.U. el "Día del Libro"), de ahí que no hablemos de las roses grogues, ni de las cursiladas, ni del volum de vendes (sentiments i centimets —Juan Marsé dixit—), ni de la lamentable politización que se hace del asunto, con apropiación indebida de esa fiesta que es de todos. Por eso nos limitamos a la literatura, la gran protagonista, publicando uno de los recuerdos más luminosos de Manuel Vilas en Ordesa.

Manuel Vilas, Ordesa, Alfaguara (2018), capítulo 118

domingo, 22 de abril de 2018

Gaznápiros, fantoches, mercachifles y zascandiles

¿Cuáles eran algunos de los insultos que se usaban en el Siglo de Oro español?


Como quizá no ignoren ustedes, hoy estamos conmemorando el 402 aniversario de la muerte de un sujeto llamado Miguel de Cervantes Saavedra (el catalán Miquel Servent, según algunos brillantes historiadores catalanes —como Jordi Bilbeny—, que sostienen que "El Quijote" fue escrito por Servent originalmente en catalán y traducido posteriormente al "idioma del imperio"). Es por esa efemérides que incorporamos aquí el magnífico retrato atribuido a Juan de Jáuregui.



Del repertorio de palabras que hemos seleccionado, no sabemos cuáles de ellas utilizaba Cervantes. Quizá habría que preguntarle al "erudito profesor Rico", un académico bastante pedante, habitual —en plan "cameo"— en las últimas novelas de Javier Marías (salvo en la que ha obtenido el Premio de la Crítica 2018, "Berta Isla", en la que por desgracia no figura Rico; quizá sea éste el único "pero" que G.U. pone a esa —en su modesta opinión— excelente novela, de la que ya hablamos en la entrada Acerca de "Berta Isla"). Por cierto, supongo que no les sorprenderá que el "erudito profesor Rico" rechace de plano las teorías de Bilbeny. Claro, es un facha más que añadir a la lista de Ada Colau.

En lo que respecta a Gran Uribe, utiliza con cierta asiduidad, aunque no toda la necesaria, las siguientes: casquivano, chisgarabís, fantoche, gaznápiro, haragán, julay, lechuguino, malandrín, mercachifle, petimetre y zascandil. Habría que añadir que... de gaznápiros, fantoches, mercachifles y zascandiles andamos bastante bien servidos, además de algunos otros especímenes, como majaderos o sinvergüenzas, adjetivos no contemplados en la lista adjunta. El resto de las palabras no las utilizamos, aunque uno no descarta incorporarlas a nuestro vocabulario habitual. O sea, que no se extrañen ustedes si empiezan a ver en el blog algunas de ellas, bastante aplicables a sujetos que nos invaden diariamente a través "los medios". Descuiden: estamos en ello.


Bultuntún: que habla sin ton ni son
Cagalindes: cobarde
Carcunda: de ideas retrógradas
Casquivano: ligerito de cascos
Catacaldos: persona que se dedica a muchas actividades y no se dedica con constancia a ninguna
Chisgarabís: persona, frecuentemente joven, de escasa formalidad o sensatez
Crapuloso: sinvergüenza
Fantoche: ridiculo, grotesco
Gaznápiro: palurdo, simplón, que se queda embobado con cualquier cosa
Haragán: persona que rehuye del trabajo
Julay: imbécil que carga con culpas por fiarse en exceso de quien no debe
Lechuguino: muchacho imberbe que se mete a galantear aparentando ser hombre hecho
Malandrín: malhechor, ruin y bellaco
Mamerto: de pocas luces
Manguarrián: poco civilizado, asilvestrado
Mercachifle: merodeador y trotamundos de quien no conviene fiar
Petimetre: que se preocupa mucho en seguir las modas y mantener la compostura
Tragasantos: santurrón, meapilas
Tragavirotes: hombre serio y erguido en demasía
Verriondo: siempre excitado sexualmente
Vidaperdurable: un pesado
Zascandil: que va de un lado a otro sin hacer nada de provecho
Zurumbático: lelo, atontado, lento





sábado, 21 de abril de 2018

Una escapadita a "Madrit"

Puerta del Sol, Madrit (21/4/2018)
Ya en Madrid con la peña blaugrana del barrio, calentando motores para increpar agriamente (como buenos catalanes com cal) al Borbó, abuchear el himno y lucir el globito que nos suministrará el señor Bartomeu dentro de un rato, además del pito con el que saludaremos al rey y al himno del invasor. Espero que no cercenen la libertad de expresión. Sería un escándalo.

Petición selectiva de perdón

«Queremos mostrar respeto a los muertos, los heridos y las víctimas que han causado las acciones de ETA, en la medida en que han resultado damnificados por el conflicto. Lo sentimos de veras». [...]

«A consecuencia de errores o de decisiones erróneas, ETA ha provocado también víctimas que no tenían una participación directa en el conflicto, tanto en Euskal Herria como fuera de ella. Sabemos que, obligados por las necesidades de todo tipo de la lucha armada, nuestra actuación ha perjudicado a ciudadanos y ciudadanas sin responsabilidad alguna. También hemos provocado graves daños que no tienen vuelta atrás. A estas personas y a sus familiares les pedimos perdón. Estas palabras no solucionarán lo sucedido, ni mitigarán tanto dolor. Lo decimos con respeto, sin querer provocar de nuevo aflicción alguna».

[A cuántos y a quiénes de los allegados de las 853 víctimas abarca esa petición de perdón, si no es indiscreción?]

G.U. tiene la misma impresión que Carnicero

Rajoy, puro y MARCA
Hace ya un tiempo que Gran Uribe empieza a estar un poco desolado. Confiaba en que el gobierno de España sabía lo que se traía entre manos, y que cuando Rajoy se fumaba un puro y leía el MARCA lo hacía porque tenía establecida in mente una estrategia "a la gallega" eficaz contra lo que estaba ocurriendo (que tan mal nos lo está haciendo pasar a muchos de los que vivimos aquí) y que la situación estaba controlada. Ahora que ve que no es así, que ese cachazudo sujeto no sabe qué c*** hacer y que sus únicas aspiraciones a día de hoy son las siguientes: quemar a sus competidores dentro del PP;  que C´s no le coma la tostada en las próximas elecciones y, finalmente, que por nada del mundo nos traigan por aquí a Fuigdemont a crear problemas de todo tipo, incluidos los orden público.




Hoy ha leído un artículo de Carlos Carnicero, un sujeto del que hace años que no tenía noticia, que resume a la perfección las sensaciones, esperemos que transitorias, que en este momento alberga Gran Uribe acerca del "temita". Por eso lo transcribe en su totalidad:

Carlos Carnicero
«No hay Gobierno en España. Es la impresión de lo que viene sucediendo en los últimos tiempos. Sobre todo, referido al fracaso de la estrategia de Mariano Rajoy frente al secesionismo.

Pero no solo en este acápite fundamental. Se instala la sensación de fin de ciclo que recuerda a lo que sucedió en la última época de la UCD en el Gobierno de España. Para que la similitud sea simétrica, solo falta la estampida final en las confrontaciones internas del PP al grito de "sálvese quien pueda".

El presidente de Gobierno hace tiempo que ha abdicado de toda acción política frente al desafío catalán. Ha dejado toda la defensa del estado en manos del Rey y del magistrado Pablo Llarena. Pero en su desidia ha dado un paso al frente. El ministro Cristóbal Montoro, sorprendentemente y sin una razón distinta que su imprudencia o su deseo de justificar su gestión, ha declarado en una entrevista en el diario El Mundo que "no se ha utilizado ni un euro de dinero público en el referéndum del 1-O".

En otras palabras, Montoro contradice de raíz la existencia de los presuntos delitos que justifican el procesamiento de los golpistas por malversación. Hasta tal punto que el magistrado Llarena ha requerido al Ministerio de Hacienda para que apuntale con datos lo manifestado por el ministro. Y todo ello con la extradición de los fugados pendiente de decisión de las autoridades judiciales de Alemania, Bélgica y el Reino Unido. Es el último episodio de una larga carrera de errores y omisiones cometidos por Rajoy desde que comenzara la más importante crisis de la democracia española desde el golpe de estado del 23-F.

La impericia del Gobierno en el intento de referéndum del 1-0 es de sobra conocida. Las fotos de la intervención policial, producto de la incapacidad del ejecutivo para prevenir la respuesta del secesionismo, apuntaló el relato secesionista en el mundo. Tuvo que mediar el Rey para establecer un sólido muro de contención del secesionismo. A la vista de lo ocurrido desde la puesta en vigor del artículo 155, la intervención se ha quedado corta. Y no solo en lo referido a la televisión pública catalana.

Fuentes cercanas a la delegación del Gobierno en Cataluña, dan cuenta de la desazón del delegado, Enric Millo, por los criterios impuestos desde el Gobierno en la administración de los órganos intervenidos de la Generalitat. Las mismas fuentes afirman que la mayor parte de las instituciones de la Generalitat carecen de un control efectivo del Gobierno de Rajoy y que están sincronizadas por canales subterráneos al servicio de los intereses del cesado presidente Carles Puigdemont. Según estas fuentes, la consigna impartida desde la presidencia del Gobierno de España ha sido la de mínima intervención y guante de terciopelo en la gestión pública de los órganos de la Generalitat.

En este momento, producto de diferencias importantes de criterio en estos asuntos, la comunicación del presidente Rajoy con el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, está rota. El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, sigue fiel a su compromiso de apoyar al Gobierno de Rajoy en la defensa del estado. Pero su descontento y sus discrepancias son profundas. La acusación de desistimiento de la política y la delegación de todo el peso en el Tribunal Supremo hace más incomprensible la posición de Montoro de cuestionar la utilización de fondos públicos sostenida por el magistrado Llarena.

Hay otros episodios que sin ser responsabilidad directa de Rajoy apuntalan la idea de fracaso en la crisis catalana. Sin duda el apoyo público y activo de los dos sindicatos mayoritarios, Comisiones Obreras y UGT a la causa del independentismo. Se ha constatado la baja masiva de afiliados en los dos sindicatos a los que nadie ha sido capaz de reconducir en su deriva de apoyo a los golpistas. La ausencia de una estrategia de comunicación internacional del Gobierno en la crisis catalana ha promovido discretas quejas de embajadores por la falta de instrucciones en sus respectivas legaciones para contrarrestar el relato secesionista.

Rajoy traslada la impresión de que toda la acción política de su gobierno está succionada por la amenaza electoral de Ciudadanos. La gestión de la crisis de Cristina Cifuentes es un buen ejemplo. Prefiere que no dimita solo con la creencia de que el apoyo de Ciudadanos a la moción de censura presentada por Ángel Gabilondo pase factura al partido de Albert Rivera por la participación de Podemos.

Empiezan a producirse abandonos en el barco del Partido Popular en medios de comunicación, hasta ahora amigos, y en sectores financieros. Lo más preocupante, sin duda, es el frente contra los intentos de secesión en Cataluña y la sensación creciente de que Marian Rajoy navega a la deriva en estas aguas turbulentas».



viernes, 20 de abril de 2018

Si no tienen plan, vayan mañana a Gerona

Plaça de la Constitució (en Gerona), se llamaba hasta ahora, pero, gracias a los 'buenos oficios' (?) de su alcaldesa (Marta Madrenas, una de las que dan la vara con la vara) cambia de nombre y el nuevo que han escogido es, como ya saben ustedes, Plaça de l´U d´Octubre de 2017. Se inaugura mañana ese cambio con una entrañable fiesta popular. Habrá cercavila, danzas tradicionales diversas y audición de sardanas.

Incomprensiblemente, no está prevista la actuación de los "Gegants de Sarrià de Ter" (agrupación de "gigantes y cabezudos" a la que pertenece el costurero Torrent, un aspecto importante de su curriculum). Tampoco la de la Colla Castellera Xoriguers, que es la colla de castells de la Universitat de Girona (no tienen tuna, claro está), bastante poco competitiva, es cierto, pero si actúan solo ellos ¿dónde está el problema? Pero en fin, este festejo un poco ramploncete quizá merece que acudan ustedes, como haría G.U. si encontrara hueco en su apretada agenda, lo cual es bastante improbable, ya que espera estar en Madrit con un globito amarillo increpando airadamente al Borbó.

Ayer presentaron el diseño de la placa que da nuevo nombre a la plaza, y en ella hay un inspirado estrambote que ha merecido el siguiente comentario de Albert Soler, un periodista de Diari de Girona al que admira bastante G.U. porque "tiene los c****** como un toro", como dirían los clásicos. Dice así en su columna titulada La Girona de l'autoajuda:

La alcaldesa de Gerona presenta la placa
«Ya escribí en su momento que poner de nombre «Plaza del Uno de Octubre» a una plaza de Gerona es muy adecuado; es bueno que los ciudadanos recuerden siempre el día que fueron engañados, el día que los políticos que los habían enviado a defender urnas lo miraban desde casa, pensando acertadamente que siempre es mejor que si se escapa un porrazo, lo reciba el pueblo. 

Mi alegría se multiplicó ayer, cuando el Ayuntamiento mostró la placa: además del nombre que debe recordar para siempre a los gerundenses que no deben fiarse de sus representantes políticos, contiene la frase "Sólo hay una cosa peor que el olvido. No saber que se olvida", y añade que tan profundo pensamiento es obra del filósofo (?) Xavier Antich.[...]

Gerona inaugura una nueva moda, lo cual es siempre motivo de orgullo. A la de exportar alcaldes para convertirlos primero en presidentes no votados por nadie y más tarde en prófugos de la justicia, suma ahora la de añadir cursilerías a las placas de las calles.[...]


Lo importante para una ciudad es crear una marca que la haga conocida. Si Gerona ha apostado por ser la capital mundial del provincianismo, bueno será mostrar a los visitantes desde el instante que la pisen y levanten la vista para saber en qué calle se encuentran. El provincianismo es inherente a los gerundenses, una sub-raza de los catalanes con eterno complejo de inferioridad respecto de la capital. De lo que se trata ahora es de potenciar este provincianismo hasta cotas universales, y hay que reconocer que la idea de añadir frases cursis a las placas de las calles, lo consigue.

Ahora vayan a saber ustedes si el presunto filósofo Antich se refería con su frase a una novia que lo abandonó, a un examen que dejó en blanco en la época de estudiante, o -lo más probable- se le ocurrió una mañana de domingo cuando, resacoso, no encontraba donde había dejado aparcado el coche. No importa, la frase cumple con todos los requisitos para formar parte de la historia contemporánea de Gerona, ya que comparte con esta ciudad los rasgos que la caracterizan: vacía, ridícula, pedante y construida sólo de cara a la galería».