sábado, 26 de noviembre de 2016

Fidel Castro y el "führercito" Aznar

Fidel Castro calificó a Aznar de
"mequetrefe caballerete, un führercito con bigotico"


Gran Uribe no va a repetir como un lorito esa especie de argumentario, en forma de adocenada frase, que distribuye Podemos (a instancias de Iglesias), para comentar en twitter la muerte de Fidel Castro de esta inspiradísima manera: "Tenía sus luces y sus sombras".

A Ánsar no le gustaba la corbata de Fidel Castro
Ni tampoco vamos a introducirnos en esas sombras, aunque hay dos luces que G.U. valora mucho de ese sujeto, a saber:

1) Que le hubiera visto el plumero a los EEUU y lo que significaban.
2) Que le hubiera visto el plumero a Ánsar, del que tenía esta opinión: "un mequetrefe caballerete, un führercito con bigotico". ¡Genial! Éste, en venganza, le dijo que no le gustaba nada su corbata y se la cambió por la suya, para acabar afirmando: "Ha salido ganando. Me parece que se ha llevado una de las mejores corbatas que se ha puesto ni se va a poner nunca". ¡So merluzo!


Por lo demás, destacar que entre los más de 600 atentados que sufrió Fidel Castro, en su mayoría organizados por la CIA, está aquel en que le pusieron un explosivo en un puro habano "Cohibas", de esos que tanto gustaban a Felipe González, pero resultó un fiasco más porque debía de tener la pólvora mojada.

"Herr Kommandant"
La cosa tiene su miga porque de pequeños, aparte de otras bromitas (como el líquido 'enfríaculos' que poníamos en la silla de nuestro tío Gerardo, utilizando un cliché de fotos para que deslizara bien mientras dormía en ella), solíamos poner un pequeño petardito en los cigarrillos que se fumaba otro tío nuestro, al que no podíamos ni ver, "El Comandante" (Herr Kommandant, en este blog), y que explosionaba justo cuando le estaba apurando su última calada. Siempre explotó, no como el de la CIA, y nunca fuimos descubiertos: estuvo "El Comandante" incluso a punto de acudir a denunciar a Tabacalera Española...



El carretero —guajira— (Guillermo Portabales)
Elíades Ochoa (from  "Buena Vista Social Club", 1997)



Ry Cooder, el productor de "Buena Vista Social Club", no estaba para boberías como las nuestras. Se embarcó en este histórico proyecto junto a veteranos de Cuba, como Compay Segundo, Ibrahim Ferrer, Elíades Ochoa, Omara Portuondo o Rubén González. Con gran clase, el guitarrista californiano se integraba en la música intemporal de los viejitos. ¿El resultado? Un disco único ("La mejor experiencia musical de mi vida" —Ry Cooder dixit—) del que Wim Wenders rodaría un documental también muy bueno.

«En Cuba esta música está viva, no es ningún vestigio que nos hayamos encontrado casualmente al entrar en un museo. Sentí que llevaba toda la vida preparándome para esto, pero, aún así, grabar este disco no era lo que yo esperaba en los años noventa. La música es una búsqueda de tesoros. Escarbas sin cesar y a veces encuentras algo. En Cuba la música fluye como un río. Se ocupa de ti y te reconstruye de dentro a fuera». 

3 comentarios:

  1. Y en esto se fue Fidel. Cuando llegó fue romántico. Eso me parece a mí ahora al cabo del tiempo. Ernesto Guevara, Camilo Cienfuegos, Fidel Castro. Este último menos porque duró más y las cosas van degenerando o digamos evolucionando a otros derroteros. Cuba, por supuesto gracias a la ayuda de la Unión Soviética, fue un lugar estratégico de referencia. Yo estuve a mediados de los 80 en Cuba y la verdad, desde mi versión turística, me pareció un comunismo alegre y caribeño. Pero pasemos por alto todo esto y veamos lo que dice G.U. en relación a Castro. Punto 1, totalmente de acuerdo con usted. Punto 2, más de acuerdo todavía. Y no le hago la pelota, por si alguien lo piensa.
    De la música cubana se podrían decir muchas cosas, pero Ry Cooder lo borda, "fluye como un río" y "reconstruye".

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    1. Aunque sea la música que toca un grupo después de cenar. MJ

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    2. Sí, me gustaría ver a la filarmónica de Berlín marcándose un danzón después de cenar.

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